Este Domingo de Ramos, la basílica de San Juan de Dios abrió sus puertas y permitió a los feligreses visitar el Templo Santo para recibir a miles de personas de todo el país.
Como es costumbre, los feligreses de distintas partes de Venezuela suelen cumplir sus promesas en algunas temporadas del año.
Lea también: Con la bendición de las palmas inicia la Semana Santa
Como fue el caso de la señora Zenia Ramírez, de 59 años, quien llegó a la Basílica desde Aragua para cumplir la promesa a Cristo y a la Virgen de Chiquinquirá por haber salvado a su hija y a su nieto.
La aragüeña contó a Noticia al Día que para esta época su hija tenía dolores de parto adelantado. “De hecho nació de cinco meses, le recé a ella y a Cristo para que me concedieran el favor de tenerlos a ambos vivos”.
Reconoció que su devoción a ella se debe a que sus padres nacieron en Maracaibo y por motivos económicos viajaron a Aragua. “Y desde que me concedió la petición he venido a pagar promesa".
Foto: Xiomara Solano.
Noticia al Día / Andrea Guerrero.