Las ponencias de este encuentro técnico y científico para el rescate del Lago de Maracaibo iniciaron con el biólogo Rómulo Márquez, en el que detalló, que los efectos climáticos, los cambios de temperatura refuerzan el desarrollo de las microalgas en el estuario zuliano.
Explicó que en el centro del Lago de Maracaibo se forma una trampa, denominado como hipolimnético, que se generan por el agua salada que es más densa, a esto contribuye además al fenómeno de floración de nutrientes que ocurren en ciertas épocas del año, o por los efectos del cambio climático producidos por efectos de los fenómenos meteorológicos El Niño y La Niña.
Hay dos factores que inciden en la producción de nutrientes, esto son la lemna y cianobacterias.
Recalcó además que el verdín en el Lago de Maracaibo se ha presentado en tiempos anteriores, pero que no había sido identificado.
A su juicio el cono hipolimnético se ha ido erosionando por la salinidad.
Olga Castejón: El Lago nos da señales
La bióloga Olga Castejón explicó en su ponencia lo referente a las cianobacterias y su comportamiento y expresó que el Lago de Maracaibo ha emitido señales.
Explicó que en el Lago de Maracaibo hay un exceso de nutrientes.
Dentro del comportamiento de las cianobacterias que le permiten crecer, reseñó que esto ocurre en épocas del año en el que se observa la nata verde o verdín que representan las cianobacterias, donde influye además el cambio de las temperaturas y la erosión, que afectan el equilibrio acuático.
La generación de ácidos orgánicos y la descomposición de bacterias generan el mal olor, pero no generan ninguna enfermedad.
Aclaró que algunas especies pueden generar afectaciones demartológicas por cianofitas o cianobacterias, pero no muerte.
En cuanto al reporte de muerte de animales relacionadas con estas bacterias en el país no se han registrado ningún hecho similar.
Aseguró que para evitar esto hay que eliminar el nitrógeno y fósforo en el cuerpo de agua, que se producen por fuentes naturales y antropogénicas (fuentes industriales, residuales), que entran por en su mayoría por las cuencas de los ríos, más que por las empresas radicadas en el Lago.
Entre las recomendaciones presentadas se destacó la reforestación del Lago a la altura de la cuenca, tratamiento de las aguas, dándole una reutilización, tomando en cuenta que el Lago tiene la capacidad de autorecuperarse.
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