La pandemia impulsó el uso generalizado de los códigos QR, que son representaciones gráficas de datos digitales escaneables con dispositivos móviles y similares a los códigos de barras que escanean los productos en las cajas registradoras. Estos son empleados para compartir menús de restaurantes, registrar citas, suscribirse a listas de correo electrónico, obtener información de ventas, incluso podrían aparecer en breve en los documentos de identidad.
Como ocurre con cualquier avance tecnológico, su mal uso puede dar lugar a una serie de problemas y riesgos de seguridad. En este artículo, exploraremos los desafíos y peligros que surgen al no ser utilizados correctamente, desde la proliferación de estafas y ataques cibernéticos hasta la violación de la privacidad, porque efectivamente un simple código sí puede convertirse en una puerta de entrada para amenazas virtuales.
¿A cuáles peligros se está expuesto al usar mal los códigos QR?
El mal uso de los códigos QR acarrea una serie de riesgos y problemas de seguridad significativos. En primer lugar, se puede caer en estafas y ataques de phishing, al dirigir a los usuarios a sitios web falsos o infectados con malware, donde los estafadores intentan obtener información personal y financiera confidencial, resultando en la pérdida de datos sensibles y posibles fraudes.
Es fundamental cerciorarse de no escanear códigos QR de fuentes desconocidas o no verificadas para evitar este riesgo.
A su vez, los QR falsificados engañan a las personas para llevarlos a compartir datos íntimos y confidenciales, como contraseñas o datos de tarjetas de crédito, con entidades malintencionadas, exponiéndose a robos de identidad.
La manipulación de los códigos cede el paso no autorizado a cuentas o instalaciones protegidas, representando una grave amenaza. Por último, los códigos QR falsificados pueden ser utilizados en transacciones financieras para llevar a cabo fraudes. Al escanear un código QR manipulado, se puede ser redirigido a cuentas fraudulentas, lo que se traduce en pérdidas económicas significativas.
Recomendaciones para escanear códigos QR con seguridad
- Verificar que la fuente de la que proviene es fiable y legítima.
- Instalar una aplicación de seguridad verificada en el móvil que pueda escanear y analizar los códigos QR y detectar posibles softwares maliciosos o webs falsas.
- Tener la última versión del sistema operativo y las aplicaciones de tu dispositivo, porque las actualizaciones suelen incluir parches de seguridad.
- Si el código genera dudas o su fuente carece de confiabilidad, hay que evitar escanearlos. Es necesario prestar atención a los errores en la apariencia del código, como cambios en los colores o la estructura, ya que podrían ser indicios de manipulación.
- No compartir información personal a menos que se esté seguro de la legitimidad de la fuente.
- Revisar y ajustar los permisos de las aplicaciones en el móvil.
- Aplicar buenas prácticas de seguridad digital, como utilizar contraseñas fuertes y únicas, habilitar la autenticación de dos factores cuando esté disponible, evitar hacer clic en enlaces sospechosos y mantener actualizado el software de seguridad en tus dispositivos.
Estas son solo algunas recomendaciones básicas, pero tal y como nos muestra ExpressVPN, existe toda una guía para escanear códigos QR con plena seguridad.
Si bien los códigos QR ofrecen una forma conveniente de acceder a información y servicios de manera rápida, su mal uso puede dar lugar a una serie de riesgos y problemas de seguridad, que al estar documentado y tomar las medidas al respecto, es posible disfrutar de los beneficios de esta tecnología sin comprometer la seguridad ni la privacidad.