En los sectores más vulnerables de las siete parroquias de San Francisco, la fundación Dama del Sur (Damasur), presidida por la primera dama Franciela Núñez de Fernández, sigue adelante con la entrega de Un Plato Solidario a las familias sureñas desde que surgió esta iniciativa en 2023.
Las actividades son organizadas por los vecinos y líderes sociales de las comunidades, quienes se encargan de preparar los alimentos donados por Damasur. Durante este mes, se ofrecieron almuerzos y meriendas en los sectores Monte Sión, Monte Sinaí, El Paraíso, Brisas del Lago, Monseñor Romero, Vista al Sol, Sabana Sur, Sur América, Juan Pablo, Nueva Jerusalén, Manzanillo, Valle Encantado, Villa Silencio, entre otros.
"Desde Damasur queremos seguir contribuyendo a minimizar de una u otra manera la desnutrición en las familias y promover la salud, afectadas por el impacto económico que enfrenta el país. Por ahora, estas entregas las hacemos cada quince días, pero la meta del alcalde Gustavo Fernández es incrementar la frecuencia y llegar a más sectores hasta contar con un comedor en cada parroquia del sur”, afirmó la primera dama.
Un proyecto que llegó para sumar
Dayana Bermúdez, responsable de las jornadas de Un Plato Solidario en El Bajo, explicó que en el transcurso de noviembre han servido en varias comunidades sopa, arepas, arroz con pollo, perros calientes y jugos. Además, en cada entrega buscan ofrecer a sus vecinos atención médica, recreación y peluquería.
Yaritza Molero, una de las beneficiadas con esta actividad, expresó su agradecimiento a Dios y al equipo que está llevando estos alimentos para los niños y abuelos más necesitados. “Que el Señor les siga bendiciendo, para que continúen con esta labor”, dijo.
Vitualdo González, quien catalogó de maravillosa esta acción, refirió: “Ojalá se continúen haciendo actividades como estas en los demás barrios, para que la gente vea que no es mentira, que sí están ayudando”.
Por su parte, Franciela Núñez de Fernández resaltó que este es un proyecto que se suma a los aportes que se vienen haciendo desde hace más de un año con el programa Barriguita Feliz y cinco comedores comunitarios. “Nuestra meta es estar presentes en cada rinconcito del municipio para llevar bendiciones y alegrar corazones”, concluyó.