Domingo 22 de diciembre de 2024
Opinión

Historia de la Educación en Maracaibo, III (por el Dr. Reyber Parra Contreras)

El proyecto hegemónico de los Andinos en el poder, en complicidad con algunos de sus aliados en Maracaibo, despojó al…

Historia de la Educación en Maracaibo, III (por el Dr. Reyber Parra Contreras)
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El proyecto hegemónico de los Andinos en el poder, en complicidad con algunos de sus aliados en Maracaibo, despojó al Zulia de su universidad en 1904; por poco también logran la supresión de la diócesis, pero a pesar de la oposición del presidente Cipriano Castro, la Iglesia maracaibera permaneció de pie, ejerciendo una fecunda labor educativa que perdura hasta nuestros días. Poco antes de la llegada del primer obispo en 1898, las Hermanas de la Caridad de Santa Ana fundaron en Maracaibo dos importantes instituciones escolares: Nuestra Señora de la Academia, el 19 de marzo de 1891 (ubicado inicialmente en la calle Obispo Lasso; luego en enero de 1916, pasaría a llamarse Nuestra Señora del Pilar) y el Colegio San Antonio, establecido el 19 de abril de 1893 (actualmente ubicado en el Barrio Andrés Eloy Blanco). La aparición de estas instituciones escolares marca el inicio de la progresiva expansión y consolidación de la educación católica en Maracaibo, donde diversas congregaciones religiosas tendrán una destacada participación, siendo la de Santa Ana la congregación femenina pionera en el ámbito escolar.

En las primeras décadas del siglo XX la oferta educativa de la ciudad era diversa: comprendía instituciones escolares de la Iglesia, dirigidas por órdenes religiosas; colegios privados, regentados por notables intelectuales; y los colegios públicos. A esta diversidad también contribuyó  la colonia alemana, con la fundación del Colegio Alemán en 1926.  Maracaibo iba expandiéndose desde el punto de vista urbano y demográfico, proceso que se aceleraría con el desarrollo de la industria petrolera a mediados del siglo XX:  De 64 mil habitantes a inicios del referido siglo, pasó a 110 mil en 1936, y subió a 270 mil en 1950. Este crecimiento demandaba un incremento en la infraestructura escolar, lo cual ocurrió en forma progresiva, con fundaciones que ya no se concentraban sólo en el territorio de las parroquias Matriz y San Juan de Dios; ahora irían ocupando las zonas periféricas, como Bella Vista y Los Haticos.

Al despuntar el siglo XX, iniciaron labores varios colegios emblemáticas de la ciudad: Instituto Maracaibo, fundado por el Dr. Raúl Cuenca en 1901; Instituto Pestalozziano, en 1903, por iniciativa de Hermágoras Chávez; Instituto Venezuela, fundado y dirigido por Francisco Esparza Alvarado; Colegio Simón Bolívar, a cargo de Sixto Acurero Aponte; Colegio Sagrado Corazón de Jesús, fundado en 1910 por Daria J. D`Windt; y en este mismo año, la Escuela de Comercio, instalada por el gobierno nacional y conducida  por Octavio Hernández. Entre las instituciones de la época con amplia tradición destacan: Colegio Nacional de Varones, Escuela Nacional de Niñas, Colegio San Luis, Colegio Cajigal y el Colegio del maestro Francisco Valbuena Ávila, de Los Haticos, donde cursó sus estudios primarios el Dr. Jesús Enrique Lossada.

En 1935, Venezuela poseía 50 colegios católicos y 17 congregaciones, compuestas en su mayoría por religiosos españoles, dedicados a la formación educativa de niños y jóvenes. La congregación de los Hermanos Maristas llegó a Maracaibo el 15 septiembre de 1925, estableciendo en esta ciudad la primera comunidad en Venezuela, integrada por Ildefonso Gutiérrez, Félix Anselmo, Carlos Florentino, entre otros. Animados por Mons. Marcos Sergio Godoy, tercer obispo del Zulia, fundaron un colegio para cursos de primaria, al que denominaron Nuestra Señora de Chiquinquirá, en la calle Pichincha; en 1943 inauguraron la actual sede en la avenida Santa Rita, cuyo diseño  fue ideado por el arquitecto Nuncio R. Sassano.

Las gestiones de Monseñor Godoy también permitieron el ingreso a Maracaibo de otras importantes congregaciones que promovieron la educación católica en la ciudad. En los primeros años de su ministerio episcopal, logró el apoyo de los padres Eudistas quienes se involucraron en la formación del clero maracaibero. Los jesuitas, por su parte, retornaron a Maracaibo, y el 01 de octubre de 1945 fundaron el Colegio Gonzaga, con 32 alumnos inscritos en primer grado de educación primaria, iniciando actividades en su primera sede ubicada en Delicias; el primer rector fue el padre Jesús Joaristi. El 09 de septiembre de 1941 arribaron a Maracaibo las Hermanas Dominicas, dirigidas por la Madre Mere Stephanie de La Croix, quienes fundaron en Bella Vista el Colegio La Presentación, el 01 de octubre de 1941. El padre Julián Martín, junto con otros paúles dieron inicio en 1952 a las labores educativas del Colegio San Vicente de Paúl. En 1956 la madre Pilar Ayerbe y sus hermanas Misioneras Agustinas Recoletas, fundaron el Colegio Santa Rita; y el 15 de septiembre de ese mismo año, las Misioneras Hijas de la Sagrada Familia de Nazaret: Inocencia Arnas y Teresita Urgell, establecen el Colegio Nazaret de Maracaibo. Posteriormente, en 1958 llegaron los padres Rosminianos, quienes fueron requeridos por el obispo para la atención de las comunidades de extranjeros europeos radicados en Maracaibo. Al poco tiempo, en 1960, los padres Giambattista Zantedeschi, Josito Gattoni y James Connolly se dedicaron a la educación de los niños, para lo cual fundaron el Colegio Rosmini, cuya sede actual comenzó a construirse el 10 de septiembre de 1966. En septiembre de 1961, los padres claretianos Samuel Santaesteban y Jesús Abad Colas fundan en Maracaibo el Colegio Claret; este último fue su director hasta el año 1983. 

También el clero diocesano, a mediados del siglo XX, contribuyó al fomento de la educación en Maracaibo, mediante iniciativas como la creación del Colegio Nuestra Señora de las Mercedes, institución parroquial a cargo del Pbro. Julio César Faría, quien la fundó el 03 de agosto de 1958, con el apoyo de las religiosas Marianitas de Ecuador, dotándola de una sede en la calle 62 con avenida 3F.

En lo que respecta a los centros escolares públicos, a mediados del siglo XX funcionaban dos liceos  en Maracaibo: el liceo Rafael María Baralt (denominación que recibió el antiguo Colegio Federal a partir de 1936) dirigido por el Dr. Jesús Enrique Lossada, cuya sede se inauguró el 03 de diciembre de 1940; y el liceo Udón Pérez, fundado el 28 de octubre de 1947, con sede en la avenida Santa Rita desde el 01 de octubre de 1960.

La educación universitaria resurgió a partir del 01 de octubre de 1946, por medio de la reapertura de la Universidad del Zulia, gracias al empeño de la sociedad zuliana por recuperar tan importante espacio de la cultura; el Dr. Jesús Enrique Lossada encabezó la justa reivindicación, y el 15 de junio de 1946, la Junta Revolucionaria de Gobierno dictó el decreto 334 que establecía la reinstalación de la Universidad del Zulia.

Además del Dr. Lossada, en la primera mitad del siglo XX sobresalen los nombres de los siguientes educadores en Maracaibo: Hermágoras Chávez, Amelia Ríos, Fernando Criollo, Rogelio Yllaramendi, Madre Tomasa Izco Mendiburo, Francisco Esparza Alvarado, Sisoes Molero Romero, Alejandro Fuenmayor, entre otros dignos representantes del magisterio zuliano.

*Cronista de Maracaibo. Profesor de historia de Venezuela en la Universidad del Zulia. Miembro de la Academia de Historia del Estado Zulia, E-mail: [email protected]

Dr. Reyber Parra Contreras

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