“Pareciera que el poder ejecutivo promueve la destrucción de la educación venezolana”. Así lo afirmó en rueda de prensa el miércoles 26 de julio Carmen Teresa Márquez, presidente de la Federación Venezolana de Maestros, quien remarcó nuevamente los diversos problemas que vive el sector.
La dirigente gremial afirmó que el año escolar 2022-2023 termina de manera accidentada, cuando más del 60% de las escuelas están en condiciones deplorables en detrimento de los estudiantes que provienen de los sectores populares.
Márquez aclaró que en las movilizaciones de protestas pacíficas que se han intensificado desde el año 2021 no solo se reclama por salario justo y firma de la contratación colectiva, sino que a estas solicitudes también se le suma la petición de tener centros educativos óptimos, donde los estudiantes puedan recibir educación de calidad.
Para la gremialista este año que culmina es el peor de la historia de la educación del país, asegurando que el gobierno nacional no se ocupa de ella.
Manifestó que como el gobierno nacional entendió que los educadores de Venezuela están mal pagados, permite que los maestros asistan a los centro educativos utilizando el formato mosaico que es impulsado por el propio Ministerio de Educación, el cual es perjudicial para la educación.
¿Cómo está la educación en las regiones?
La presidenta de la FVM expuso su preocupación por lo que sucede en varias regiones del país con respecto a la educación.
Puso como ejemplo el estado Portuguesa, donde no se cumplió con el total del calendario escolar. De igual forma responsabilizó al gobierno nacional de que en el estado Barinas se perdiera el año escolar, ya que no hubo clases práctiicamente.
Para finalizar indicó que están a la espera de una reunión con la Vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, con la finalidad de dialogar los temas de interés del sector educativo, entre ellos, un ajuste de salario y la restauración de beneficios que se cercenaron por la aplicación del instructivo de la Onapre.
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