La reina Sofía de España, madre de Felipe VI, permanece ingresada en el hospital por tercer día, recuperándose de una infección urinaria y, aunque evoluciona favorablemente, no hay pistas de cuándo podría recibir el alta.
La reina emérita, de 85 años, ingresó en una clínica de Madrid la noche del martes, cuando se le diagnosticó una infección del tracto urinario.
La casa real española informó el miércoles de la hospitalización de la esposa del rey emérito Juan Carlos I, que estaba en observación y de que la evolución era positiva, y desde entonces, no ha facilitado más información.
Todo apunta a que la reina Sofía permanecerá este viernes en la clínica privada y podría ser el fin de semana cuando recibiese el alta, si no tiene ninguna complicación.
«Está bien. Con muchas ganas de salir», comentó el jueves Felipe VI tras visitarla con su esposa, la reina Letizia. Después de que se marcharan llegó a la clínica la infanta Elena, hija mayor de Juan Carlos y Sofía.
El rey también vio a su madre el miércoles, así como Elena, aunque en visitas separadas.
Durante la mañana de este viernes, no hubo constancia de ninguna visita familiar.
Sí se vio a uno de los asistentes de la reina Sofía que le ha hecho llegar un centro de flores que le han regalado y, posteriormente, a otro empleado del Palacio de la Zarzuela, su residencia, con un portatraje y una maleta.
EFE