El caso de Erika Morales conmovió al país. La joven quedó cuadripléjica tras ser atacada con una botella en la altura de la cabeza en una discoteca. Desde ese entonces, su vida cambió para siempre e inició una ardua batalla para recibir la eutanasia.
El ataque ocurrió cuando ella, de apenas 16 años, fue agredida brutalmente. Oriunda de Pasto, Nariño, Morales quedó en coma; sin embargo, cuando despertó, la situación no fue alentadora: ella había perdido su movilidad.
En la emisión de las 7 de la noche de ‘Noticias Caracol’, se confirmó la noticia del fallecimiento de la joven, quien tenía 20 años. A inicios de este 2025, su caso se difundió masivamente luego de que ella expresara su voluntad de recibir la eutanasia y los complejos inconvenientes que tuvo con la EPS.
No obstante, Emssanar EPS -entidad que prestaba sus servicios a Erika- aseguró en un comunicado difundido el 21 de febrero que garantizaron los derechos a la joven en su solicitud, por lo que el comité evaluó el caso. Tiempo después, se confirmó la aceptación del procedimiento, el cual no fue definido con una fecha específica.
¿Qué se sabe sobre el fallecimiento?
‘Noticias Caracol’ anunció que la joven murió en el Centro Médico Valle De Atriz, ubicado en Pasto.
Los primeros informes que se conocieron del caso apuntaron a que Morales había tenido una complicación médica.
No obstante, medios nacionales dicen que su muerte se dio porque, al parecer, se le concedió su voluntad de recibir la eutanasia este 1 de marzo.
Cabe resaltar que todavía no hay un pronunciamiento oficial por parte de sus familiares.
Entre los detalles que se saben, Tatiana Morales habría compartido un mensaje en su WhatsApp. “Vuela alto, mi bello ángel, te amo, hermanita, siempre”, según difundieron algunos medios de Pasto.
Identificaron a las posibles agresoras
En 2021, en una noche del 2 de agosto, la vida de Erika Morales cambió para siempre. Ella fue atacada por dos mujeres que le propinaron varios golpes con una botella. Hace poco se conoció que identificaron a las posibles agresoras del crimen.
Las presuntas sospechosas fueron reconocidas como Glair Gómez y Leidy León. El caso sigue abierto y la familia clama por justicia.
Cuando sucedieron los hechos, ella cursaba noveno. “Era una joven estudiosa, cursaba noveno de bachillerato”, dijo en su momento su hermana.
Erika Morales duró un año y siete meses en coma, pero cuando volvió a estar consciente todo cambió.
"Había perdido totalmente su movilidad, su respiración, el especialista habló con mi madre y le dijo que no era un pronóstico alentador", relató su hermana a ‘Caracol Noticias’. Ante esto, el diagnóstico final fue que quedó cuadripléjica.
Vale la pena mencionar que para manifestar su deseo de la eutanasia, ella se comunicaba señalando las letras del abecedario.
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Noticia al Día/Con información de El Tiempo
