La planta denominada Mammoth está ubicada en medio de un campo en Islandia, donde una empresa suiza el pasado miércoles de mayo inauguró una segunda máquina dedicada a aspirar el dióxido de carbono del aire para luego almacenarlo bajo tierra.
Esta es la segunda máquina que construyen con este objetivo, mucho más poderosa, porque multiplica por diez su capacidad con el objetivo de eliminar millones de toneladas de CO2 de aquí a 2030.
Cuando esté en pleno funcionamiento podrá eliminar 36 mil toneladas de CO2 del aire al año.
Está compuesta por 12 contenedores, similares a los que se utilizan en el transporte marítimo, los cuales están apilados contra un fondo de montañas.
Mammoth está ubicada a solo unos cientos de metros de Orca, una instalación pionera inaugurada por la nueva empresa suiza Climeworks en septiembre de 2021 en medio de un campo de lava cubierto de musgo.
En su operación, los ventiladores de los contenedores comenzaron a aspirar aire ambiente y a liberarlo, en gran parte purificado de CO2, a través de las rejillas de ventilación situadas en la parte trasera.
Todo esto se realiza mediante un proceso químico y funciona con la cercana planta geotérmica ON Power. Se espera que, para finales de este año, se instalen 72 unidades alrededor de la planta donde el CO2 capturado se comprime y se disuelve en agua dulce antes de inyectarlo a alta presión en la roca basáltica subterránea con el propósito de encerrar al principal culpable del calentamiento global.
Hasta el momento, se han almacenado unas diez mil toneladas de CO2 por año mediante técnicas de captura directa de aire con almacenamiento de carbono en todo el mundo, incluidas cuatro mil toneladas por Orca y el resto se ha realizado principalmente en instalaciones experimentales.
Con información de NTN24