Las donaciones a la campaña política de Donald Trump para las elecciones presidenciales sumaron en unas pocas horas, justo tras conocerse el veredicto de culpabilidad, un total de 34,8 millones de dólares, lo que rompió todos los récords, asegura esta mañana un comunicado del equipo de campaña.
Estas donaciones supusieron de hecho casi el doble de la mayor registrada hasta ahora en la plataforma WinRed, y procedieron principalmente de lo que llaman microdonaciones o aportaciones de unos pocos dólares.
Fue tal el interés de los donantes en los momentos inmediatos tras el veredicto que la plataforma ‘se cayó’, según contaron ayer varios medios y hoy reconoce la campaña al explicar que “el sistema se sobrecargó con los apoyos”.
De los donativos registrados ayer, casi un 30 por ciento proceden de donantes que nunca habían aportado a la campaña.
“El presidente Trump y la campaña estamos inmensamente agradecidos por esta avalancha de apoyo de los patriotas del país entero. El presidente Trump está luchando por salvar a nuestra nación el 5 de noviembre (fecha de las elecciones)”, concluye el comunicado.
Trump: “El veredicto real”, en las elecciones
Trump, que apareció con una corbata azul y un pin con la bandera de Estados Unidos, recibió la noticia con el ceño fruncido y cara triste.
En la calle, junto al tribunal, los partidarios y detractores de Trump se enzarzaron en algunos casos en peleas a gritos, pero sin llegar a la violencia, desde que se hizo público el veredicto. Algunos lloraron pero otros vitorearon a la Justicia. Los dos grupos estaban separados por vallas.
Tras ser declarado culpable, el candidato del Partido Republicano arremetió contra el proceso y lo tildó de “amaño” y de “vergüenza”. “El veredicto real lo dará el 5 de noviembre el pueblo”, afirmó a la prensa a las puertas de la sala.
Añadió que seguirá “luchando” y aprovechó para lanzar algunos de sus temas de campaña: “Ya no tenemos el mismo país, tenemos un desastre dividido. Estamos en declive, con millones de personas colándose desde prisiones e instituciones mentales, y terroristas apoderándose del país”.
Él siempre ha defendido su inocencia y ha calificado en múltiples ocasiones este proceso como una caza de brujas que busca interferir en su campaña por las presidenciales de noviembre próximo, donde ya es el virtual candidato republicano y se enfrentará al presidente actual, el demócrata Joe Biden.
“Nadie por encima de la ley”, dicen en el equipo de Joe Biden
Por su parte, el equipo de campaña del presidente estadounidense, Joe Biden, consideró que el veredicto de un jurado de Nueva York contra el exmandatario republicano Donald Trump (2017-2021) muestra que “nadie está por encima de la ley”.
“Hoy en Nueva York vimos que nadie está por encima de la ley”, manifestó en un comunicado el director de Comunicaciones de la campaña, Michael Tyler.
El equipo de Biden aseguró que Trump, su futuro rival electoral en los comicios de noviembre, había “creído erróneamente” que no afrontaría consecuencias por “violar la ley para su beneficio personal”, pero hoy la realidad demostró que no es así.
Los 34 delitos de Trump
El jurado ha dado por probado más allá de toda duda razonable que Trump falseó, voluntariamente y con conocimiento, los reembolsos a su entonces fiel colaborador y asesor legal Michael Cohen por valor de 420.000 dólares (unos 387,78 mil euros) con la intención de ocultar el pago a Daniels antes de las elecciones de 2016, a cambio de mantener sus secretos.
Trump quería que no se diera a conocer la versión de Daniels sobre un supuesto encuentro sexual entre ambos en un hotel del Lago Tahoe (California) en 2006, durante un torneo de golf en el que Trump quedó en un deshonroso puesto 62. Los pagos y documentos se realizaron en 2017.
Los documentos que dan pie a los 34 cargos de los que Trump ha sido declarado culpable de delitos de falsificación documental son 11 cheques, 12 comprobantes de pago y 11 facturas destinados a Cohen por valor de 420.000 dólares.
De ese monto, 130.000 dólares (unos 120 mil euros) fueron ocultados de diversos modos para reembolsar a Cohen el pago por el mismo monto a Daniels, 180.000 fueron pagados para cubrir posibles consecuencias fiscales, 60.000 en un bono para Cohen y 50.000 para otros gastos a proveedores.
Los cargos podrían haber sido considerados solo una falta bajo la ley del estado de Nueva York si no se hubiera demostrado también que tenían “la intención de defraudar con el motivo de cometer otro crimen o permitir la ocultación de su comisión”.
Esa ocultación de otro crimen, como argumentaba la Fiscalía, ha sido el incumplimiento de la ley electoral de Nueva York que no permite “la elección de una persona para un cargo público por medios ilegítimos”.
Con todo, la noche en la que Trump invitó a Daniels a su suite en el Lago Tahoe envuelto en un pijama de seda ha sido, contra todo pronóstico, histórica.
EFE