Antonio Gildo de Sousa, de 62 años, es presuntamente acusado de frotar su órgano genital contra el trasero de una joven en un evento religioso, en Brasil.
Por lo que la feligresía al detectar este hecho, inmediatamente grabó el acto, y sirvió como prueba para ser detenido por la guardia privada de la iglesia.
De una vez detectado el hombre, fue entregado a la policía y será acusado de agresión sexual.