La desconfiguración del software en una máquina de anestesia, desató las alarmas médicas en la Costa Oriental del Lago, provocando toda una operación de salvamento de vidas que involucró a las máximas autoridades sanitarias de la región zuliana.
La doctora María Romero, secretaria de Salud del estado Zulia, explicó al detalle los acontecimientos que, desde el martes pasado, tuvieron en vilo a la comunidad de pacientes de Cabimas, Santa Rita, Ciudad Ojeda y demás poblados del municipio Baralt.
“Cuando recibí el informe donde anunciaban que la máquina de anestesia del pabellón de Emergencias del Hospital de Cabimas, había dejado de funcionar, en lo primero que pensamos fue en los pacientes”. Así comenzó el relato la doctora Romero, quien, con mucho énfasis, explicó que la prioridad en ese momento era, más allá de la sustitución o reparación de la máquina, el de salvar vidas.
“Inmediatamente establecimos toda una operación de traslado de los pacientes que tenían que ser intervenidos hasta Maracaibo y giré instrucciones precisas al Hospital de Ciudad Ojeda, el Pedro García Clara, para que evitasen, a su vez, el envío de pacientes a Cabimas y que se preparasen para atender por toda la regla, cualquier caso médico y de emergencia, proveniente del municipio Baralt”.
Comisión autorizada
Juhab Messer, director regional de la Red Hospitalaria, el doctor Rubén Sánchez, director del Hospital de Cabimas y la técnica de electromedicina, responsable de evaluar las máquinas, salieron desde Cabimas hasta Santa Rita, siguiendo instrucciones precisas de la doctora Romero.
“La orden era que fueran al Hospital de Santa Rita, porque teníamos informes que, en ese centro asistencial, se encontraban tres máquinas de anestesias deshabilitadas y la urgencia era buscar una, para seguir atendiendo a los pacientes en Cabimas”.
En efecto, la búsqueda, convertida en una carrera contra el tiempo, incluyó la elaboración de documentos para que el bien mueble hallado, fuera trasladado por la necesidad del servicio y de manera temporal, desde Santa Rita hasta Cabimas.
El cuerpo de Bomberos con sus ambulancias, continuaban trasladando personas a la capital marabina y justo cuando se iniciaba la operación técnica de llevar la máquina de anestesia a su residencia temporal en Cabimas, aparecieron grupos de personas, impidiendo la acción, bajo el supuesto de que se cometía un acto ilegal.
“La intención del doctor Sánchez y del Gobierno regional, fue el de salvar vidas, nunca jamás, podemos decir que se estaba cometiendo actos en contra de las leyes de la República”.
Al final, el problema fue solventado por el propio gobernador Manuel Rosales quien a sabiendas de la situación que enfrentaban sus comisionados, dio órdenes que adelantasen la incorporación de las nuevas máquinas de anestesia a usarse, tras la remodelación del hospital cabimero.
Noticia Al Día/JCG
