La mañana del pasado primero de enero, minutos antes de que Leopoldo Dante Tévez, mejor conocido como Leo Dan, dejara este plano terrenal, le pidió a sus hijos que lo llevaran hasta el jardín de su residencia en Miami, EEUU, para contemplar el ambiente, respirar un poco de aire fresco y volver a escuchar "Te he prometido", una de las canciones más trascendentales de toda su discografía.
Ese día, Leo Dan se despertó bien temprano (algo que no era habitual en el cantante debido a los problemas de salud que padecía desde hace meses) y le dijo a su esposa, Marietta Tevez, que lo ayudara a sentarse cerca de la ventana de su habitación para ver el jardín. Poco después y con mucha serenidad, le pidió a sus hijos que lo sacaran para sentarse en una silla de madera y disfrutar de los rayos del sol.
"Hoy quiero sentir el sol en mi piel y escuchar el canto de los pájaros", les dijo a sus seres queridos.
Mientras contemplaba el jardín que tanto amaba, le dijo a su nieto mayor que le colocara "Te he prometido", uno de los temas que lo había catapultado al mundo del espectáculo, enfatizándole que no le buscara cualquier versión, sino la que él grabó en 1.969, cuando era un joven lleno de sueños, según un post en la red social TikTok publicado por María Cordova (Maria.cordova79).
Este emotivo momento ocurrió debajo de uno de los árboles más antiguos de la propiedad del artista argentino, plantado por el mismo Leo Dan durante su juventud y el cual se había convertido en un símbolo de su vida y legado. Cuando escuchó nuevamente su canción, cerró los ojos dejando que cada nota musical lo envolviera, tal y como cuando estaba en el escenario.
Su esposa, Marietta Tévez, lo tomó de la mano y le susurró "estamos aquí contigo, como siempre", mientras el intérprete de "Como te extraño", levantaba la mirada hacia todos los familiares que le hacían compañía para decirles: "Gracias, ustedes son mi mejor canción". Después de esto, la respiración de Leo Dan se volvió más pausada y prácticamente, pasó al sueño eterno rodeado de sus seres queridos.
Noticia al Día / José Gregorio Flores
