También conocidos como señales de control de tráfico, los semáforos los encontramos a diario en casi cualquier calle. Sus colores nos recuerdan a una tómbola online luminosa, pero en lugar de diversión nos dan un poco de seguridad en las calles.
No fue hasta 1868 que apareció el primero en la ciudad de Londres. Y, aunque estamos acostumbrados a seguir las reglas respetando una señal luminosa, los semáforos no siempre funcionaron de esta manera.
¿Sabías qué? El primer semáforo no era eléctrico ni luminoso, de seguro que no, al igual que muchas otras cosas.
Es por ello que hemos traído una lista de 7 curiosidades de las que quizás no estés al tanto.
1. La palabra semáforo deriva del griego
Sema viene de σῆμα y foros de φόρος que significa portador. En palabras simples, quiere decir portador de señales.
2. El primer semáforo para el tráfico de calles explotó
Así es fue diseñado por John Peake Knight, pero funcionaba con palancas (parecido al ferroviario) y lo manejaba un agente policial.
Para que los carros pudieran verlos por las noches, tenía incorporado dos faroles de gas con los colores verde y rojo. No obstante, pasado 2 meses de su instalación explotó, hiriendo de gravedad al conductor.
3. El 1910 se instaló por primera vez el semáforo automático
Con la llegada del modelo Ford T las ventas de autos se incrementaron debido a su bajo costo. Esto les permitió a millones de personas circular por la ciudad.
Por ende, el tráfico de carros a motor en las calles era mucho mayor. Entonces surgió la necesidad de controlar el tránsito con la implementación de un semáforo automático.
Siendo en el año 1910 que apareció por primera vez.
4. El semáforo con tres luces que conocemos se inventó en 1920
William Potts fue el propulsor de incorporar la luz amarilla en medio de la roja y la verde.
Pese a que los semáforos ya estaban dispersos alrededor de todo el mundo, este se diferenciaba del resto que tenían dos luces.
Pues con tres etapas, se podía advertir al conductor que venía un cambio a la luz roja.
5. Los colores se copiaron del código del sistema ferroviario
Este sistema posee un espectro de claridad increíble, ya que se puede reconocer desde una distancia larga con facilidad.
Hablando de colores, el amarillo como bien sabemos, indica una advertencia para reducir la velocidad. Asimismo, se seleccionó con la intención de hacer una transición entre el verde y el rojo.
Por su parte, el rojo es de color brillante asociado con peligro e indicando que debe detenerse.
En cuanto al verde, en un principio del sistema ferroviario significaba señal de precaución. Pero, en la actualidad quiere decir paso libre.
6. El semáforo peatonal surgió a mediados del Siglo XX
Los indicadores que conocemos para el cruce de personas, aparecieron en la década de los cincuenta del siglo pasado.
Esto ocurrió debido a la gran masa de vehículos en las calles, regulando de forma conjunta a peatones y autos.
7. Los semáforos tienen interpretaciones diferentes
Las normativas y estándares de las indicaciones de estos, pueden variar de acuerdo al país donde te encuentres.
Por ejemplo, si estás en Canadá, la luz ámbar (amarilla) indica que debes conducir con atención. Además, está fusionada con la luz roja en las intersecciones de cuatro vías.
Para otros países, la luz amarilla indica a los motociclistas que pueden seguir conduciendo si la calle está despejada.
En Austria, Israel, Serbia, Rusia y, algunas zonas de Canadá y México, la luz verde se ilumina por unos segundos antes de aparecer el ámbar.
En otros sitios, antes de que la luz cambie a verde, la amarilla y la roja están encendidas.
Por otra parte, en Japón, el verde se sustituyó por el azul. ¿Por qué? No se sabe muy bien todavía. Aunque al parecer tiene que ver con un asunto de lingüística.
En este país se emplea la misma palabra para ambos colores en función del contexto y del matiz.
