"El brillante sol de Caimare Chico baña el mar bonito de espuma y amor”, dice el estribillo de una gaita que Cardenales del Éxito en 1988 le regaló a la Guajira, para realzar el turismo en este imponente balneario y quedó solo el tradicional canto
“Me voy a pasar el día allá por Caimare Chico”. Esa siempre fue la expresión que se escuchaba un día domingo entre los zulianos que escogían con carácter prioritario la playa en la Guajira, ícono de los lugares turísticos de la región en los años 70,80 y 90.
Las caravanas de carros con sus “cavitas” a bordo para el hielo y las “guayacolitas”, escuchando las gaitas del momento o música venezolana, las recuerdan los zulianos cada vez que llegan días feriados, como la fiesta de carnaval, la Semana Santa, o el baño de Año Nuevo, para la suerte y sacar los malos espíritu cuando recorrían hasta 80 kilómetros desde Maracaibo, para ir un domingo de "chapuzón" que hoy en día es solo un recuerdo.
En la vía hacia la población El Mojan, a 12 minutos de Paraguaipoa está la playa, una franja de arena oscura bañadas por aguas turbias, debido a que se encuentra en el fondo del golfo. Fue la preferida de los zulianos, donde los indígenas recorrían las extensas orillas ofreciendo sus mercancías autóctonas, desde conservas, chinchorros, mantas, cotizas, hasta, piedras, adornos, practicas y creencias espirituales.
Una playa de referencia turística
Consultamos al colega Algimiro Montiel dese el municipio y señaló que, "Caimare" sigue siendo un punto de referencia de los zulianos para salir de la rutina un fin de semana, pero las cabañas que estaban dispuestas se encuentran en total abandono.
Asegura que no hay restaurantes y la hidratación debe llevarse desde la población de Sinamaica porque todos los depósitos o negocios de venta de agua, hielo, licor están cerrados en el recorrido de la vía principal. El lugar carece de mantenimiento y exige ciertas precauciones en horas nocturnas.
Desde Maracaibo, el viaje dura una hora aproximadamente. La mejor forma de llegar es tomar la vía hacia El Moján y el trayecto debe realizarse con suma precaución, quizá una de las cosas más importantes es evitar el exceso de velocidad ya que existen puntos de control militar, policial por la inseguridad.
Se alejó el turismo
La caída del turismo se ve a simple vista. Se levantaron inicialmente 27 cabañas de 76 estimadas en el proyecto financiado por el Gobierno, y están desgastadas, inundadas de arena y destrozos.
“El brillante sol de Caimare Chico baña el mar bonito de espuma y amor”, dice el estribillo de la gaita que Cardenales del Éxito en 1988 le obsequió a la Guajira para realzar el turismo en este imponente balneario y quedó solo el tradicional canto.
Habitantes del municipio Guajira aseguran que solo pueden ofrecer su hospitalidad a los pocos turistas que se aventuren a recorrer la Laguna de Sinamaica, la playa de Caimare Chico y los “exóticos” palafitos que se encuentran en el pueblo.
Aseguran que, sus espacios recreativos están en la nada, como Caimare Chico, que está descuidada, llena de basura, sin una enramada para que el turista pueda colgar su chinchorro y que la pase bien.
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