Una lección histórica de fútbol, así se puede resumir lo que ocurrió la noche del miércoles en el Etihad Stadium. El Manchester City no permitió que se repitiera el episodio de la temporada pasada, y salió con un paso abrumador a destrozar al Real Madrid, a quien terminó goleando por un aplastante marcador de 4-0 en el partido de vuelta de las de semifinales de la Uefa Champions Legue.
El conjunto dirigido por Pep Guardiola exhibió todo su poderío y talento ante su gente, una digna demostración del "fútbol total". El Madrid se vio disminuido en la mayor parte del encuentro, no supo cómo hacer frente ante la maquinaria celeste, nunca encontró la manera de prender la lámpara de los milagros, que hacía a los blancos lograr esas remontadas y proezas históricas en esta competición.
Goleada histórica
Los Citizens arrancaron la primera parte con un despliegue ofensivo realizado prácticamente a la perfección, el típico juego de posesión y transiciones rápidas de Guardiola, pero llevado a su máximo esplendor, como lo hacía en el Barcelona. Bernardo Silva, de un impresionante partido, marcó dos goles al minuto 23 y 37, lo que significó un golpe sobre la mesa en la eliminatoria.
A pesar de algunas llegadas del delantero estrella Erling Haaland en la primera parte, quien no tuvo suerte a puerta en esta importante llave, el Real Madrid entendió que debía reaccionar si quería seguir teniendo opciones para lograr una gloriosa remontada, y al cierre de la primera mitad dejó una mejor cara.
Sin embargo, el City supo reencontrar el ritmo en la segunda parte y empezó a someter a los blancos nuevamente. Los dirigidos por Carlo Ancelotti no parecían que iban a poder lograr la hazaña, y al minuto 76 un autogol de Éder Militão finiquitó lo que quedaba de esperanzas para los merengues.
Pero todo no quedaría ahí, al minuto 90+1 el campeón del mundo con Argentina, Julián Álvarez, quien había ingresado por Haaland, colocó la cereza al pastel al anotar el 4-0 y sentenciar la magnífica actuación del Manchester City que causó la eliminación dal Real Madrid por un marcador global de 5-1.
De esta manera, los Citizens se hicieron respetar en casa, demostrando que son uno de los mejores equipos de la élite europea de los últimos cinco años. Ahora, tras eliminar al conjunto con más "Orejonas", el Manchester City se medirá en la final de la Uefa Champions League ante el Inter de Milán en Estambul, Turquía. Lo que promete ser un partido emocionante.
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