El béisbol es un gran deporte que atrae tanto a niños como a adultos, así como también a hombres como a mujeres. Se trata de un deporte en equipo en el que la precisión es clave porque todo gira alrededor de un equipo que lanza una bola para que su contrincante la golpee con un bate. Para sobresalir en este deporte se necesitan varios dotes o cualidades que se desarrollan luego de arduos entrenamientos, como por ejemplo: la fuerza para lanzar la bola o pegarle, y la rapidez para conquistar más bases que el equipo adversario. Es cierto que no muchos cuentan con estos dotes, sin embargo, hay deportistas que pareciera que nacieron para dedicarse al béisbol, ¿quiénes son los afortunados?
Los partidos de béisbol garantizan un momento de diversión, así como también de entretenimiento y este clima de fiesta lo crean jugadores como Miguel Cabrera, nacido en Maracay, Venezuela, con sus 40 años, ha superado todas las expectativas en la disciplina. Cuando esta estrella, que lanza y batea con la derecha, sigue acumulando victorias y récords tan populares como un código Betway código promocional. Actualmente, juega para los Tigres de Detroit y entre sus máximas conquistas están: la distinción al jugador más valioso en 2012-2013, en el mismo año, 2012 se quedó con el premio de la triple corona de bateo en Grandes Ligas, y como si fuera poco, se llevó cinco Bates de Plata a su casa en toda su carrera que aún continúa.
Por otro lado, el venezolano Omar Vizquel, quien actualmente es el mánager de los Toros de Tijuana, se destaca por sus impresionantes once Guantes de Oro como campocorto. Esta estrella del béisbol tiene en su historia el récord de más partidos jugados como short-stop y, además, cuenta con más de 2900 partidos en las Grandes Ligas de Béisbol en su haber. Increíble, ¿no? Si bien Omar ha dejado el campo de acción como jugador, hoy por hoy se dedica a transmitir su experiencia y conocimientos desde otro lugar, el de entrenador de uno de los mejores equipos de la Liga Mexicana de Béisbol.
Tantos logros han obtenido estos dos astros como personas los siguen, los aman y disfrutan de verlos jugar o dirigir encuentros de béisbol. No es poca cosa ubicarse entre los mejores en un deporte de tanta demanda física y psíquica. Ya sea como jugador, en el caso de Miguel Cabrera o como entrenador, en el caso de Omar Vizquel, ambos han demostrado que después de un gran esfuerzo vienen las recompensas, no solo económicas, ya que seguramente pueden estar conformes con su situación monetaria, pero sobre todo recompensas a nivel personal y profesional.
