La Policía francesa detuvo a nueve hinchas del Marsella y buscaba a otros sospechosos tras un violento ataque a los autobuses que llevaban al equipo de fútbol de Lyon y a hinchas del club, según el Ministerio del Interior francés.
El técnico Fabio Grosso sufrió una lesión en la cabeza en la agresión, que obligó a cancelar el encuentro del equipo en Marsella, el cual iba a contar con un aforo de 65 mil espectadores. Grosso recibió 13 puntos de sutura tras golpearlo una cerveza por encima del ojo.
Cinco policías resultaron heridos en el ataque del domingo por la noche, indicó el ministro del Interior, Gerald Darmanin, a la televisora BFM. El suceso acaparó titulares en el país entre preocupaciones sobre la violencia en el fútbol.
Lee más: Fabio Grosso sufre grave lesión tras un ataque al autobús del Lyon
"Vergüenza y asco" era el titular de portada del diario deportivo L’Equipe, con una imagen del rostro ensangrentado de Grosso.
La ministra de Deportes, Amelia Oudea-Castera, pidió una "respuesta global" y dijo que la Liga Francesa, los equipos y los grupos de aficionados debían asumir responsabilidades. En declaraciones el lunes a la televisora France-2, pidió sanciones más duras contra los infractores.
Ella y Darmanin defendieron la protección policial al equipo de Lyon, a pesar de que las medidas no bastaron para impedir el ataque.
Agencias
