Aún hay tiempo para lanzarles un salvavidas a la gente y al planeta, y los líderes deben dar un paso y actuar ya, advirtió el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, considerando que el planeta está "al límite", según los últimos datos sobre la crisis climática y pidió a los líderes que acometan urgentemente acciones radicales para "evitar lo peor".
"La Tierra está haciendo una llamada de auxilio. El último informe del Estado del Clima Global muestra un planeta al límite", dijo el diplomáticos en un mensaje de video emitido durante la presentación de los datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en Ginebra.
El informe detalla el clima extremo del año pasado que ha dejado récords en el calentamiento global y la subida del nivel del mar y "un reguero de destrucción con miles de muertos, millones de desplazados, cosechas echándose a perder y grandes pérdidas económicas", resumió.
"Todos los indicadores nos ponen en alerta roja en lo referente a la relación del clima con nuestros hábitos de consumo y producción de energía y de generación de gases de efecto invernadero", señaló la argentina Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, tras presentar su informe.
Guterres achacó el "caos climático" a la contaminación de los combustibles fósiles y estimó que los glaciares han perdido más hielo que nunca -en el caso de la Antártida, una superficie equivalente a 25 veces Suiza en un solo año-, lo que está amenazando a las comunidades costeras.
Los últimos datos indican que a finales del año pasado el planeta bordeó "temporalmente2 una temperatura global superior en 1,5 grados centígrados a la de los niveles preindustriales, subrayó el diplomático, que insistió en que cada pequeña fracción de grado afecta al futuro de la vida en la Tierra.
No obstante, y pese a su tono pesimista, Guterres dedicó casi la mitad de su mensaje a ofrecer claves "para evitar lo peor del caos climático": esencialmente, recomendó combatir "la velocidad del cambio climático con una acción climática radical".
En concreto, instó a los países a acelerar el fin de la era de los combustibles fósiles impulsando la transición energética, estableciendo planes climáticos nacionales que contemplen sus economías al completo antes de 2025, y financiando la protección climática de los países en desarrollo. "Aún hay tiempo para lanzar un salvavidas a la gente y al planeta", insistió.