En una hazaña que ha sorprendido al mundo, el artista plástico venezolano Josué Benjamín Figueroa, de apenas 15 años, logró crear la escultura más alta del mundo para un escultor de su edad, una impresionante estatua de seis metros de altura de San Agustín de Hipona.
Josué, ha sido aclamado como el escultor más joven de Latinoamérica, y contó sobre su increíble logro, comentando que había comenzado a hacer “muñequitos” de plastilina y ahora era el creador de una de las imágenes más admiradas del mundo.
Destacó el papel de la práctica, la dedicación y la disciplina como clave para lograr su hazaña, señalando que “se puede lograr lo que sea” con esfuerzo y determinación.
La escultura de seis metros de altura sobre San Agustín de Hipona ha sido instalada en Guacara, estado Carabobo, y figura entre los logros artísticos más importantes de Latinoamérica en los últimos años.
Esfuerzo y dedicación
Aunque todavía Josué es muy joven, ya se ha convertido en un ícono del arte en su país y en Latinoamérica, demostrando que el talento no conoce límites de edad y que los sueños más ambiciosos pueden convertirse en realidad con esfuerzo y dedicación.
Reveló a través de sus redes sociales que se está postulando para el ‘Guinness World Records LatAm’ con su impresionante escultura, esta sería otra hazaña para el joven artista y una gran fuente de orgullo para un país entero.
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Noticia al Día/Con información de Universidad de Carabobo