El incendio en Guyana que dejó al menos 20 muertos en una escuela del centro del país, al parecer niños en su mayoría, está entre los más mortíferos de los últimos 30 años en residencias escolares, según una base de datos de AFP.
– 2001 : 67 muertos en Kenia –
En la noche del 25 al 26 de marzo de 2001, un incendio provocado en la residencia de una secundaria cerca de Nairobi mató a 67 alumnos. De los escombros se retiraron los cuerpos calcinados de 58 varones de entre 14 y 18 años, mientras que otros nueve estudiantes murieron en el hospital a causa de sus heridas.
– 1994 : 40 muertos en Tanzania –
El 18 de junio de 1994, 40 estudiantes fallecieron quemadas vivas, y 47 resultaron heridas en un incendio que asoló una escuela secundaria católica para chicas en la región de Kilimanjaro (norte). El incendio, que destruyó completamente una residencia y otros dos edificios, fue declarado mientras las alumnas dormían.
– 2001 : 30 muertos en Nigeria –
El 5 de marzo de 2001, 30 estudiantes murieron quemadas vivas cuando se incendió el dormitorio donde se encerraron con llave, como todas las noches, en una escuela secundaria pública del centro del país.
La noche del incendio, la escuela sufrió un fallo eléctrico, por lo que solo estaba alumbrada con lámparas de petróleo.
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– 2019 : 28 muertos en Liberia –
En la noche del 17 al 18 de septiembre de 2019, 27 alumnos de una escuela coránica, todos entre 10 y 20 años y de origen guineano, además de un profesor mueren en el incendio de su residencia, adyacente a la mezquita de Bassa, en los suburbios de Monrovia, capital de Liberia.
El fuego, posiblemente causado por un problema eléctricos según la policía, se originó cerca de la única puerta de acceso al dormitorio, sorprendiendo a los alumnos mientras dormían.
– 2017 : 23 muertos en Malasia –
El 14 de septiembre de 2017, 21 estudiantes y dos profesores mueren en el incendio provocado de una escuela coránica en Kuala Lumpur. Las víctimas se quedaron atrapadas en su residencia por culpa de las rejas metálicas que cubrían las ventanas.
Un adolescente de 16 años fue condenado en primera instancia por prender fuego al dormitorio, pero recurrió la sentencia.
AFP