La Vigilia Pascual es una celebración religiosa cristiana que se lleva a cabo durante la noche del Sábado Santo o de Gloria, en la que se conmemora la resurrección de Jesucristo.
Es una de las celebraciones más importantes del calendario litúrgico cristiano y marca el final de la Semana Santa.
El Sábado es el día en que experimentamos el vacío. Si la fe, ungida de esperanza, no viera el horizonte último de esta realidad, caeríamos en el desaliento: "nosotros esperábamos… ", decían los discípulos de Emaús.
El Sábado está en el corazón mismo del Triduo Pascual. Entre la muerte del Viernes y la resurrección del Domingo nos detenemos en el sepulcro. Un día puente, pero con personalidad. Son tres aspectos -no tanto momentos cronológicos- de un mismo y único misterio, el misterio de la Pascua de Jesús: muerto, sepultado, resucitado:
"…se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo… se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, es decir conociese el estado de muerte, el estado de separación entre su alma y su cuerpo, durante el tiempo comprendido entre el momento en que Él expiró en la cruz y el momento en que resucitó. Este estado de Cristo muerto es el misterio del sepulcro y del descenso a los infiernos. Es el misterio del Sábado Santo en el que Cristo depositado en la tumba manifiesta el gran reposo sabático de Dios después de realizar la salvación de los hombres, que establece en la paz al universo entero".
Ritos del sábado de Gloria
Durante la Vigilia Pascual del Sábado de Gloria se realizan diferentes ceremonias y rituales, entre los que destacan:
- Bendición del fuego: se enciende un fuego nuevo en el exterior de la iglesia y se bendice, simbolizando la luz que llega con la resurrección de Jesucristo.
- Procesión con el cirio pascual: se lleva a cabo una procesión en la que se porta el cirio pascual, una vela grande que representa a Cristo resucitado.
- Liturgia de la Palabra: se leen diferentes pasajes bíblicos que narran la historia de la salvación y la resurrección de Jesús.
- Renovación de las promesas bautismales: los feligreses renuevan sus promesas bautismales, recordando su compromiso con la fe cristiana.
- Bautismo de catecúmenos: aquellos que han recibido formación para ser bautizados, reciben el sacramento del bautismo durante la Vigilia Pascual.
- Liturgia eucarística: se celebra la Santa Misa, en la que se recuerda la última cena de Jesús con sus discípulos y se comparte el pan y el vino como símbolos del cuerpo y la sangre de Cristo.
La Vigilia Pascual es una celebración muy emotiva y significativa para los cristianos, ya que representa el momento en que Jesucristo venció a la muerte y resucitó, ofreciendo la salvación a toda la humanidad.
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