Cientos de refugiados sirios residentes en el Líbano cruzaron la frontera de regreso a su país, pocas horas después de que los insurgentes entraran a Damasco y la declararan «libre» del presidente, Bashar al Ásad.
Los refugiados sirios celebran la entrada de los insurgentes a Damasco, en la localidad libanesa de Bar Elias, a pocos kilómetros de la frontera entre ambos países.





Noticia al Día / EFE