La Fiscalía de Perú informó que amplió la investigación preliminar a la presidenta Dina Boluarte en el caso de los relojes de lujo Rolex que exhibió en varios actos, al incluir la posible comisión de un delito de cohecho pasivo impropio, que se suma al de enriquecimiento ilícito.
A través del Área de Enriquecimiento Ilícito y Denuncias Constitucionales, el Ministerio Público anunció que ha expandido la investigación preliminar abierta a la mandataria por la supuesta comisión de los delitos de enriquecimiento ilícito y omisión de consignar declaraciones en documentos.
Detalló que dispuso ampliar la pesquisa para comprender a Boluarte por hechos referidos a la presunta comisión del delito de cohecho pasivo impropio.
También anunció que amplió las investigaciones preliminares para comprender al gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, quien admitió que prestó los relojes de lujo a la mandataria, por la presunta comisión de delitos de cohecho activo genérico.
El origen del Rolexgate
Tras el allanamiento de su vivienda y el Palacio de Gobierno el 30 de marzo, como parte de la investigación, la jefa de Estado declaró el 5 de abril durante más de cinco horas ante la Fiscalía. Luego dio un pronunciamiento ante la prensa en el que negó tener relojes de la marca Rolex y otras joyas valoradas en miles de dólares.
“Debo reconocer que fue una equivocación haber aceptado en calidad de préstamo estos relojes de mi amigo Wilfredo Oscorima”, agregó antes de indicar que los lució “en el ánimo de representar bien al país” y ya los ha devuelto a su propietario.
Boluarte también aseguró que “todo lo que han dicho es falso” sobre la posesión de joyas valoradas en miles de dólares antes de mostrar una pulsera, un collar y pendientes que, según dijo, son “de bisutería fina” y de plata, respectivamente.
Cinco días más tarde, la Fiscalía incautó tres relojes Rolex y una pulsera propiedad de Oscorima, un empresario dedicado a los casinos y apuestas. También tres veces gobernador de Ayacucho y tiene varias investigaciones abiertas por el Ministerio Público por delitos de corrupción.
Boluarte mantuvo silencio
Dina Boluarte mantuvo silencio durante una audiencia en la Fiscalía por un caso de presunta corrupción cuando fue ministra de Desarrollo e Inclusión Social (2021-2022), según confirmó el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén.
En rueda de prensa, el primer ministro dijo que el caso se remonta a un “suceso que presuntamente se habría producido en el periodo que comprende cuando era ministra”, bajo la presidencia de Pedro Castillo, derivado de presuntas irregularidades en la adjudicación de un programa social de alimentación escolar.
“No debe sorprendernos, el silencio es un derecho del ciudadano” y “no tiene por qué entenderse como una manera de eludir la justicia o una obstrucción de la justicia”, afirmó Adrianzén.
Añadió que la sola concurrencia a la citación es una muestra de la voluntad de la presidenta para colaborar con la justicia.
La investigación por la que acudió a la Fiscalía está relacionada con el programa de alimentación para las escuelas públicas Qali Warma, informó El Comercio.
Según ese rotativo, la investigación fue abierta por la posible comisión de un delito de negociación incompatible al contratar a una persona próxima a ella, Víctor Torres Merino, para el suministro de ese programa.
EFE