El defensa brasileño Dani Alves fue sentenciado en Barcelona, España, a pagar cuatro años y seis meses de presión tras la demanda de agresión sexual originada a finales de diciembre de 2022.
El futbolista carioca lleva desde el pasado 20 de enero de 2023 en prisión preventiva, tras ser acusado de agredir sexualmente a una joven en la discoteca Sutton de Barcelona.
Además de la condena, Alves también deberá cumplir con cinco años de libertad vigilada, orden de alejamiento con la víctima, pago de una indemnización correspondiente a 150 mil euros y los gastos del juicio.
Según los magistrados, se confirmó que "la víctima no consintió y que existen elementos de prueba, además del testimonio de la denunciante, para entender probada la violación".
De acuerdo con la acusación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron en una zona reservada de ese local de moda en la que Alves habría coincidido con la mujer.
Posteriormente, el exlateral de la selección brasileña invitó a la joven a entrar en otra área exclusiva donde estaba un pequeño baño.
Según el Ministerio Público, el futbolista agredió y forzó a mantener relaciones sexuales a la víctima, pese a su resistencia.
La fiscal, Elisabet Jiménez, consideró durante el juicio que la mujer presentó un "relato absolutamente creíble", el cual reveló que Alves usó la violencia para forzar a la joven, quien trató de zafarse.
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